Hablemos de psicología
Escrito 0-2: 2 ¿Cómo contacté yo con la Psicología (2: continuación)?
Del nudo gordiano a la Psicología:
1 Ciencias en la Universidad de Barcelona:
Aquel curso me matriculé y cursé el primer curso de Ciencias, era un curso selectivo y común a todas las ciencias. Teníamos cinco asignaturas, matemáticas, física, química, biología y geología. En segundo curso, una vez aprobadas todas las asignaturas del primero ya debíamos elegir una especialidad, que coincidía con las cinco asignaturas reseñadas del primer curso.
En octubre de 1964 me fui a Barcelona, mi madre me había dado la dirección de una tía suya que estaba en la calle Mallorca, bueno, no dejaba Mallorca del todo, y que estaba relativamente cerca de la Universidad, Universidad de Barcelona (UB), en la Plaza Universidad, un edificio precioso, con un gran jardín verde, lleno de pájaros, con un estanque lleno de peces rojos y grises y ranas verdes. Calle Mallorca, calle Aribau (con el Cine Aribau) y Universidad. Y así empecé mis primeros días de estudiante universitario. Mi número de matrícula era el 666 (curiosamente mi número de matrícula de bachillerato y Precio era el 1111, todas las cifras del número, como iguales), estaba integrado en el grupo 7º de primer curso, un grupo de 105 alumnos , no recuerdo que hubiera ninguna mujer entre los 105, tampoco recuerdo ningún alumno del grupo, teníamos las clases de matemáticas, física y química en el aula número 3 de ciencias, mientras que las de biología y las de geología en el aula número 8 de ciencias. El profesor de matemáticas era un menorquín (yo lo consideraba como nuestro, al menos era balear, como yo), era el dr. Vaquero que junto con otro dr. De matemáticas, el dr. Teixidor, habían editado, en fotocopias, los temas de la asignatura, en tres volúmenes, teníamos clase diaria, de lunes a viernes, ambos incluidos, de 11 a 12. De física no recuerdo ni el nombre del profesor, ni el horario (imagínse que eran tres horas semanales), ni el nombre del libro de ejercicios y problemas que usábamos como apoyo a la teoría que él explicaba. De química teníamos el dr. Cuesta, teníamos clase lunes, miércoles y viernes de 13 a 14, teníamos, como referente, un libro muy grande y muy bueno (explicaba la química de forma muy clara y comprensible), que todos los alumnos comprábamos, le decíamos "el Babor ", nombre del linaje del autor, y un libro más pequeño que proponía ejercicios y problemas de la teoría del Babor, también de muy fácil comprensión, lo había escrito el propio autor junto con otro doctor, el dr. Ibarz, sin embargo nosotros le decíamos "el Baborin". Aún conserva estos dos libros de química y de vez en cuando hojeo las páginas del primero (han pasado 60 años); de biología teníamos un profesor que era cura que daba las clases con su sotana, también era muy buen biólogo, era el dr. Basabé, teníamos las clases los martes y jueves de 10 a 11, recuerdo un día que nos envió al lavadero a atrapar una rana cada uno, para experimentar el acto reflejo en las patas traseras; de geología teníamos de profesor al dr. Solé y las clases el martes y jueves de 9 a 10.
Un buen día mi tía-abuela, Leonor, me dijo: "Bueno, ¿y qué piensas quedarte aquí toda la vida?" Me puse rojo como un tomate, mis padres no me habían dicho que iba allí solos mientras encontrara otra residencia, que parece ser que era lo que habían acordado, no recuerdo que contesté, bajé a la calle, fui al quiosco de más cerca y compré la Vanguardia, el diario de mayor difusión en Barcelona y el que llevaba más anuncios. Fui a un banco, me senté, y con un bolígrafo iba marcando las posibles residencias. Encontré una muy cerca, en la calle Valencia, que era "una señora que alquilaba una habitación compartida", con derecho a baño, por supuesto. Fui, me abrió y me pasó a la habitación en cuestión, era una habitación bastante ancha, con dos camas, una mesa-escritorio a los pies de una de las dos camas, un gran armario empotrado, con dos partes, derecha e izquierda, y una gran ventana que daba a la calle. Me dijo: "A mí ya me va bien, pero como aquí hay otro chico debería venir un momento en que él esté y que él dé la conformidad, puede venir hoy tarde a partir de las cinco". Hacia las cinco volví a ir y me abrieron "la patrona" y el muchacho que debía aceptarme como compañero de habitación. Cuando nos vimos pusimos cara de asombro, "ostras, ¿eres tú?" Resultó ser un felanitxer que ya conocía del año que yo hacía 1er de bachiller en Felanitx, él hacía 3er, y de vernos los veranos en Es Port, ¡Qué casualidad! Era Toni Grimalt de la famosa sastrería Grimalt de Felanitx, estudiaba medicina y era "el otro chico que habitaba aquella habitación". "¡Claro que lo acepto como compañero de habitación!" exclamó. Fui a casa de la tía abuela a buscar mis pertenencias, dentro de mi maleta y me trasladé a la nueva residencia (habitación). El tiempo que residí en aquella habitación compartida con Toni fue un tiempo bien aprovechado para mis estudios "de todas las ciencias". Pasados dos meses de mi llegada, Toni se molestó con la patrona (no recuerdo por qué) y se fue. La patrona, que estaba muy contenta con yo, me dijo: "Estoy tan contenta con usted que no voy a reponer la plaza vacante, la habitación será exclusivamente para usted" (lo cual le suponía tener justo la mitad de ingresos por el concepto alquiler plaza en la habitación). Aquello en lugar de ser una mejora para mí fue una perdida, solo me añoraba más de los padres y hermanos que cuando estaba con Toni.
Muy cerca de allí, en la calle Provença, había una residencia de estudiantes de los Padres Paúles, en la que residían varios compañeros del curso pasado, el Precio, en Sant Francesc de Palma, con quien me relacionaba bastante. Las habitaciones o celdas eran pequeñas y unipersonales, que compartían los religiosos del orden y los estudiantes. Había otros espacios para los baños, estudio, salón, e, incluso, un espacio grande, casi vacío, con sólo dos mesas. Un día un compañero del bachillerato y Precio, Juan Luis Cabrer Barbosa (si lees este escrito, contacta conmigo), me dijo: "Ha muerto un fraile de los padres Paüls, consecuentemente quedará una celda libre, si quieres la puedes pedir tú". La verdad era que ocupar la celda de un fraile muerto me hacía algo de 'yu yu', pero las ganas de estar en una residencia con muchos amigos pesaba mucho más. Recuerdo que, para hacer méritos frente a los frailes, fui al funeral del religioso muerto y obtuve la aceptación para hospedarme en la residencia. Y esto fue la muerte académica de mi escolarización universitaria de ciencias. Efectivamente, en la residencia había varios grupos, con algunos casos de pertenecer a más de un grupo, había un grupo que solía ir a tomar un aperitivo o una caña antes de comer, otro grupo iba a tomar café después de comer , otro grupo iba al cine con cierta frecuencia, yo estaba apuntado a los tres grupos, con cierta frecuencia iba con Juan Luis a la sala casi vacía, poníamos las dos tablas en cada uno de los dos extremos y, con una pelota 'Gorila' y un palo cada uno, jugábamos a hockey, empleando las dos mesas como porterías. Resultado: lo suspendí todo.
2 Escuela de Turismo y San José Obrero:
Mi padre me dijo:
- "El próximo curso volverás a Barcelona, pero no puedes hacer lo mismo que has hecho este. En nuestra casa no nos sobran el dinero".
Yo, avergonzado por haber gastado tanto sin el menor rendimiento, le dije:
- "No, no volveré a Barcelona, me pagaré la carrera universitaria cuando gane suficiente como para pagármela yo mismo".
- "¿Y qué vas a hacer, pues, el próximo curso?"
Corría el año 1965. Por aquel entonces no había ninguna oferta universitaria en Mallorca, con lo que sólo tenía tres posibilidades de estudios: Comercio, Magisterio y Turismo (la escuela oficial de turismo de Baleares se había abierto la año anterior, magisterio y comercio ya llevaban muchos años existiendo). Le contesté:
- "Pues Magisterio" (yo pertenecía a una familia de maestros, mi padre había hecho magisterio, aunque ahora ya pertenecía al cuerpo de directores, una prima mayor que yo también).
- "Eliges lo más fácil!!!" me replicó.
- "¿Entonces qué quieres que elija, que no sea tan fácil"?
- "No lo sé, por ejemplo Turismo"
- "Entonces haré Turismo,...".
Me matriculé en la 'Escuela Oficial de Turismo de Baleares', que había fundado, un curso antes, don Felipe Moreno. Teníamos las clases, de 17h. a 22h., en el Estudi General Lul·lià. Llevábamos uniforme, vestido, chaqueta y pantalones (las mujeres, regazo), azul. Fue el primer pico que seguí unos estudios mixtos. Hice muchos amigos (recuerdo uno que el nombre y los dos linajes, todo eran nombres: Andrés Bartolomé Luises) y amigas (entre otros, Cati Bujosa, hija del famoso Hotel Portixol).
Dado que las clases eran de 17h. a 22h. tenía casi todo el día libre. Hacía relativamente poco que se había construido la iglesia y el colegio Sant Josep Obrer, en la calle Reis Catòlics. Había enseñanza primaria y bachillerato masculino y bachillerato femenino. El preceptor y entrenador de baloncesto del bachillerato masculino, Tomeu Ferragut, empezaba su servicio militar, le había tocado hacerlo en Palma. Me propuso que, en la práctica, le sustituyera el tiempo que él hiciera el servicio; él me pagaría una parte de su sueldo (a nivel oficial, todo seguía igual), acepté y combiné la actividad de preceptor de los alumnos de bachillerato (vigilarles los tiempos que tenían estudio y no tenían ninguna clase) con la de los estudios de Turismo. Cuando se acercó en junio del año 1966 mi padre, aunque no había aceptado que hiciera Magisterio, me dijo que convenía que me presentara libre a los exámenes de Magisterio, sin dejar las clases y exámenes de Turismo de enseñanza oficial . Así lo hice. Ese año el plan de magisterio era el plan de 1950, se podía acceder a los estudios con el cuarto de bachiller y la revalida de cuarto aprobados, los estudios duraban tres años. Los estudios se realizaban en la Escuela Normal (de magisterio) masculina o femenina, según los casos.
En cada curso había asignaturas similares a las de bachillerato (Matemáticas, lengua española, ciencias, geografía, historia,...) y asignaturas específicas de magisterio (prácticas de enseñanza, pedagogía, caligrafía, trabajos manuales,... ), en cada uno de los tres cursos dejabas unos días de clase, para ir a hacer prácticas de maestro, que se hacían en las escuelas masculina y femenina Anexas, que estaban en el mismo edificio que la Normal respectiva y estaban atendidas por el Regent (Director ) y maestros que hubiesen hecho, con aprovechamiento suficiente, la formación para ser maestro de Escuela Anexa. En la modalidad libre te podías matricular en el curso completo o en asignaturas de un nivel determinado aunque no tuvieras aprobadas todas las asignaturas de los niveles inferiores. Así yo, este curso 1965-66, me matriculé de los tres cursos completos. Aprobé asignaturas de los tres cursos, 1er. 2º y 3er (las asignaturas que ya había aprobado en los bachilleratos elemental y superior y en el Precio, como matemáticas, ciencias, lengua española, geografía, historia,...), pero también suspendí asignaturas de los tres cursos, las específicas de magisterio ( pedagogía, caligrafía, trabajos manuales, prácticas,... nadie me las había enseñado y yo no las había visto en el bachillerato). Por suerte aprobé todas las asignaturas de primero de Turismo.
El curso siguiente, 1966-67 hice lo mismo, 2º oficial de Turismo, preceptor en el bachillerato masculino de Sant Josep Obrer y examen, por libre, de asignaturas de los tres cursos de magisterio, con los mismos resultados: Todo el segundo de Turismo aprobado y asignaturas de los tres cursos de magisterio, por matrícula libre, aprobadas y otros también de los tres cursos, suspendidas.
En Turismo, no recuerdo en qué curso, había una asignatura que se llamaba "Psiciología", nos la daba el sr. Ballester que, después, durante muchos años sería director del Colegio Luis Vives. Fue la asignatura que más me gustó. Además, nos pasó el cuestionario de Heymans-Le Senne, de carácter. Yo salí Apasionado (combinación de emotivo, activo y secundario). El profesor dijo que era el mejor carácter de los ocho posibles (más tarde aprendí que esto es discutible).
El curso siguiente, 1967-68 en la Escuela Normal comenzaba un nuevo plan de magisterio, el Plan 1967. Se exigía, para poder entrar, tener el curso y la reválida de 6º aprobados, era una carrera, igualmente, de tres años, de los que el tercero ya no teníamos clases teóricas con los profesores, sino que era un curso completo en una escuela de primaria (no en el Anexa, con lo cual, ésta, el Regente y los maestros especiales, perdían la suya función: enseñar las prácticas a los alumnos de magisterio). Estas prácticas eran evaluadas por un tribunal compuesto por el director o directora de la Normal, el Inspector (en 1968 todos los inspectores de enseñanza eran hombres) jefe y un profesor o profesora de la Normal.
Mi padre, mi eterno director y dirigente en estos años de mi nudo gorgia académico me dijo: "Por enseñanza libre siempre habrá algunas asignaturas de magisterio que nunca aprobarás, creo que te conviene matricularte oficial de Magisterio". Y así lo hice. Tomeu Ferragut ya había terminado su servicio militar y se había incorporado a la jefatura de estudios del bachillerato masculino de San José Obrero y ya no era necesario que yo lo sustituya. Así el curso 1967-68 cursé, oficial, el primer curso de magisterio, de lunes a viernes, de 9 a 17, con unas horas libres al medio día para comer (14 asignaturas), y el tercer curso de Turismo , de 17 a 22 (11 asignaturas). La Escuela Normal estaba en la calle Joan Capó (gran inspector jefe del tiempo de la II República, y antes), entre la carretera de Sóller y la de Valldemossa. La Escuela Oficial de Turismo ya he dicho que estaba ubicada en el Estudi General Lul·lià. Las tardes iba a la escuela de Magisterio en Vespa, a la finalización de la última clase tomaba la Vespa y me dirigía a la de Turismo, solía llegar 15 minutos tarde a la primera clase. Este curso, en junio aprobé 25 asignaturas, 14 de magisterio y 11 de Turismo. Terminé todos los estudios de Turismo (tres cursos) excepto la reválida final, los que aprobaban todas las asignaturas de los tres cursos y la reválida final obtenían el título de "Técnico en Empresas Turísticas". A los que aprobábamos todas las asignaturas de los tres cursos, pero no la reválida, como fue mi caso (el alemán, para mí, era imposible aprobar, y, además, ya no más pensaba en la carrera de magisterio y la posterior de psicología), nos daban un diploma que decía "Diploma de Estudios Turísticos. 3º".
3 Carrera de Maestro. Plan 1967
Así, el curso 1967-68, libre ya de los estudios turísticos, dejé mi colaboración con el Colegio San José Obrero y me dediqué exclusivamente a la carrera de Magisterio. El edificio era relativamente nuevo, antes las Escuelas Normales y las Anexas estaban en lo que ahora es el Instituto Joan Alcover, situado en la Calle Joan Capó de Palma, larguirucho, tenía una planta baja y tres pisos. En la Planta baja estaban las dos Anexas, la de muñecas y la de niños, y en los pisos las dos Escuelas Normales, la femenina en el ala derecha y la masculina en el ala izquierda, ambas separadas por un largo pasillo, ocupado por Secretaría, Dirección y otras dependencias. Allí seguíamos la enseñanza el primer curso del nuevo Plan 67, y el segundo curso del segundo y tercero del anterior plan, del 50.
Este curso, por edad, ya me tocaba realizar el servicio militar obligatorio, pero iniciando la carrera de Magisterio, pedí la primera prórroga. Los compañeros que iniciaban los estudios, cumpliendo los 17 años en el curso no les tocaba hasta cuatro años más tarde. Algunos, por edad o por voluntad, en lugar de realizar el servicio ordinario hacían "Milicias Universitarias" (tres veranos consecutivos), nuestro plan de Magisterio del 67 tenía categoría suficiente para poder realizarlas, según las disposiciones correspondientes. Yo preferí hacer el servicio ordinario, contando el campamento inicial, 14 meses, y poder disfrutar de los tres veranos en Es Port.
El curso 1968-69 Hice segundo de Magisterio y pedí la segunda prórroga.
En Magisterio, Don Melchor Rosellón, Regente (Director) de la Escuela Anexa de Niños, y Profesor de Prácticas Nostro, nos aplicó un test de Inteligencia (no recuerdo si sería Otis, en todo caso un test en el que te hacían una serie de preguntas, muchas, que suponían que tuvieras que pensar bien las respuestas, cuando nos dio los resultados, sólo los detectados positivamente, se dirigió a mí y dijo: "Sr. Ramis, usted es lo que debe obtenido más respuestas acertadas, todas, pero dado que el Sr. Barceló tiene tres años menos que usted, a él le corresponde la mejor puntuación.Aquí aprendí los conceptos de puntuación directa y puntuación típica o tipo (teniendo en cuenta la edad) de los tests de capacidades o aptitudes, también nos aplicó el cuestionario de Heymans-Le Senne, para conocer la polaridad de las características de la emotividad (emotivo-no emotivo), actividad (activo-no activo) y resonancia (primario o secundario) de nuestro carácter y así permitir definirlo, lo mismo que, antes me había aplicado el sr. Ballester en la Escuela de Turismo. El resultado fue el mismo, no había cambiado de carácter, era Apasionado, combinación de emotivo, activo, secundario. Le dije a Don Melchor, "sí, el mejor de los ocho que pueda ser", tal y como me lo había dicho el Sr. Ballester, al que me contestó: "No tiene por qué ser así, depende, podría ser, por ejemplo, el flemático (no emotivo, activo, secundario)". Lo de "conocer a las personas, a mí mismo ya las demás, sus capacidades o aptitudes, su manera de ser (temperamiento, carácter, personalidad) y actuar (actitudes, conductas) y forma de relacionarse, para poder modificar los comportamientos inconvenientes y mejorar tanto a un nivel específico como a un nivel global; y poder hacer esto como profesional" me iba gustando. Igualmente, la asignatura de psicología, tanto en Turismo como en Magisterio, era la que más me gustaba.
El curso 69-70 Cursé el 3er de Magisterio y pedí la tercera y última prórroga para realizar el servicio militar. El tercer curso era totalmente distinto al primero y segundo, lo hacíamos todo el curso en una escuela de enseñanza primaria a un nivel determinado que íbamos cambiando a lo largo del curso, en el nivel correspondiente estábamos con el maestro del curso correspondiente, observando cómo ejercía la función de maestro él, hablando con él y, en ocasiones sustituyéndolo, para hacer un dictado, plantear un problema o explicando una lección. En la Escuela de Magisterio, nos habían distribuido a los alumnos de tercero en grupos de dos o tres, entre todas las escuelas de Palma. A mí, junto a otros dos compañeros, en la emblemática Escuela Graduada de Palma, aquella en la que 35 años atrás, había hecho las prácticas nuestro profesor de prácticas, Don Melcior Rosselló, donde vio ir a la escuela el alcalde de Palma, Emili Darder, al menos en dos ocasiones, una para examinar una partida de mobiliario escolar recibida y otra para examinar la calidad y adecuación de la comida preparada para el almuerzo de los alumnos. Un tribunal formado por el inspector jefe, la directora y otro profesor de la Escuela Normal evaluaban nuestro trabajo, venían algún día inesperado, nos decían que explicáramos la lección del día, o efectuamos un dictado, o planteáramos un problema, ... y anotaban lo que encontraban en una libreta; también consultaban al maestro de nuestra clase. Un día, que el tribunal evaluaba, yo contaba una lección, cuando el inspector jefe me interrumpió y me dijo que me acercara al grupo de los tres. Lo hice y me hizo una observación (no recuerdo cuál era). Yo le dije: "Pero para decirme esto no debe interrumpirme la presentación ante todos los alumnos, al terminar, cuando ya hayamos salido del aula, me la hace y ya está":
Y me replicó: "Usted es un discutidor del tribunal"!!! En junio aprobé este curso de prácticas y obtuve el título de Maestro, que me habilitaba para ejercer de maestro de enseñanza primaria en cualquier escuela privada.
Para ser maestro en una escuela pública era necesario aprobar unas oposiciones de ingreso en el cuerpo de maestros de enseñanza primaria (funcionaria), oposiciones que aprobaría en el mes de junio del curso siguiente 1970-71.
Julio, agosto y parte de septiembre de 1970, agradables vacaciones de verano.
4 Primer ejercicio de Maestro (CIDE) y servicio militar (Oficina de Selección)
El curso 1970-71, de septiembre de 1970 a junio de 1971, ejercí de maestro en el CIDE (Centro Internacional de Educación), del que era director D. Guillem Estarellas. Me asignaron un curso de 4º nivel de primaria, 4ªC. En el CIDE numeraban los distintos niveles de Primaria en femenino: 1ª, 2ª, 3ª,... mientras que los de bachillerato lo hacían en masculino: 1º, 2º, 3º, 4º,...
Los cursos de 4ª eran los cursos de preparación para el ingreso de bachillerato. Los alumnos que lo aprobaban pasaban de 4ª de Primaria al 1er de Bachillerato. Uno de mis alumnos fue Rafael Escales que, posteriormente, sería un nadador destacado. En octubre de 1970, acompañado de una hermana, fui a la Caja de Reclutas de Palma, a la Avenida Gabriel Alomar, a presenciar el sorteo del reemplazo de 1970, el mío (en realidad yo era de 1967, pero, después de disfrutar de tres prórrogas, quedaba encuadrado en el de 1970). En cada reemplazo había cuatro llamadas: Enero, Abril, Julio y Octubre. Yo era del cuarto llamamiento, el de octubre de 1971. A mí me tocó "Canaries" (sin especificar isla). El CIR (Centro de Instrucción de Reclutas) 15 estaba en la isla de Tenerife. Cuando llegamos al CIR, aún vestidos de paisano (aún pasarían unos días hasta que nos dieran las piezas militares) y formados bajo las órdenes de los PM, se acercaban a la formación distintos soldados veteranos que, en lugar, de haber sido destinados fuera , habían tenido destino en el mismo CIR y se dirigían a nosotros: "¿Hay alguien de Albacete?", ¿Hay alguien de Linares?", se acercó un cabo, y gritó: "¿Hay alguien de Mallorca?" una yo y otros compañeros, pocos, levantamos la mano y decir "Sí, yo". Este cabo y yo nos conocíamos de por Cala Gamba, aunque yo no sabía que él tenía el destino en el CIR. Nomía Jordi Vadell. dijo: "Ahora os pasarán unas pruebas, si lo haces bien podrás hacer el CIR en la Oficina de Selección, con lo que estarás liberado de guardias e instrucción. En la Oficina corregimos tests y, de acuerdo con los resultados de los mismos, decidimos los destinos de los reclutas”.
Otra vez la Psicología y yo nos volvíamos a cruzar y, esta vez, acabé de decidirme: esta era la carrera que yo haría, con recursos económicos suficientes para pagármela yo mismo, la Psicología. Pasamos todos al comedor y utilizamos las mesas del comedor como mesas para contestar a los tests que nos presentaban, el D-48 (dados. Nos presentaban series, 49, de dados y nos pedían que llenáramos qué dado continuaría la serie). Terminé de los primeros; cuando acabábamos teníamos que quedar inmóviles en nuestro sitio esperando a que terminaran el resto de reclutas. Al cabo de un rato vino Jordi y me dijo: "Has fallado una pregunta, pero has obtenido puntuación suficiente para poder hacer el CIR en la Oficina de Selección", me dijo que le siguiera, fuimos a una mesa como de escritorio grande, donde había un grupo de gente (un oficial, el propio Jordi, un grupo de soldados veteranos y un grupo de reclutas, como yo) que, con una plantilla rectangular, iba corrigiendo el mismo test ; cada corrector iba cogiendo un tiesto (un doble Din A4) de un caramull, lo corregía, lo puntuaba y lo ponía en otro montón de las macetas ya corregidas. Me pasaron una plantilla de corrección, me dijeron cómo hacerlo y empecé a corregir. A partir al día siguiente, cuando los demás comenzaban la jornada de aprendizaje de soldado, nosotros íbamos a la Oficina de Selección donde yo aprendía a diagnosticar psicológicamente.
Fui destinado a la Oficina de Selección de este Centro de Internamiento de Reclutas
Además del citado D48 (de capacidad mental general) aplicado inmediatamente al ingresar en el CIR, aplicábamos, a lo largo de toda la estancia en el mismo CIR, una serie de "tests" que, según los resultados, permitían hacer un perfil de cada recluta, perfil que supondría el destino de cada uno en el momento de terminar la preparación. Estas pruebas eran (indigo las siglas, el nombre y la puntuación máxima posible de las pruebas): IG2 Dominó 48, FV Verbal-palabras 50, FN Matemática-operaciones 33, RD Figuras-Dibujos 60, FE Espacial (Palancas) 16, AM Problemas Visuales 50, C-1 Electricidad 20, C-2 Conducción 20, C-3 Mecánica 20 y tres escalas más: P-1 Tranquilidad - nerviosismo, P-2 (no tengo registrado que media), P-3 Sinceridad -Falsedad. Según los resultados salían nueve perfiles: 1 Combate especial, 2 Combate técnico, 3 Combate general ("carne de cañón"), 4 Electrónica, 5 Transmisiones, 6 Electricidad, 7 Conductores, 8 Mecánicos, 9 Administrativos.
5 Destacamento de Altura y comienzo Psicología en la Universidad de la Laguna (Tenerife)
Una vez terminado el período de instrucción para reclutas, poco antes de Navidad de 1971 ya éramos soldados y se nos enviaba al destino que nos correspondía. Yo tuve la suerte de contactar con un capitán de artillería mallorquín, hermano de un tío político mío que era el responsable de un destacamento de Altura, pasado el Barrio de la Alegría, que constaba de dos partes, una media montaña, llamada "el Proyector", por que había un proyector; y una en lo alto de la montaña, llamada "el Telemetro" por que había un telémetro. En las múltiples visitas que le hice los días de salida cuando estaba en el campamento quedamos que me reclamaría para el Destacamento de Altura, los soldados, ocho, repartidos en dos turnos de cuatro habitaban las dependencias de "El Projector" y estaban encargados de velar por el propio proyector y por el telémetro y mantenerlos limpios. El proyector nunca lo empleamos mientras yo estuve allí; el telémetro, dos días, uno el mes de abril y uno el mes de octubre, días que había tiro de artillería de costa, nosotros dábamos los datos de distancia y dirección del objetivo, que era una especie de cilindro metálico que remolcaba a un destructor y desde otra batería disparaban el cañón. Cada día, a las 10 de la tarde, teníamos que llamar por el teléfono de campaña, sólo tenía una línea: Destacamiento de Altura - Cuartel de Almeida (Tenerife) de lo que el Destacamiento dependía, y cuando contestaba, decir: "A sus órdenes mi teniente, sin novedad en Altura", aunque los otros tres soldados estuvieran unos en un bar de Tenerife y otro en la Laguna.
Al Destacament d'Altura, a la dependència on dormíem i on hi havia un armari amb cinc cetmes (el nou fusell de l'exercit de terra; l'anterior era el mosquetó) i el telèfon.
En vista de que tenía tanto tiempo libre decidí empezar a ganar tiempo y empezar los estudios de Psicología. En la Universidad de Tenerife, que estaba en la Laguna estaba, entre otras, la facultad de Filossofía y Letras, que ofrecía la carrera de Filossofía y Letras, carrera de cinco cursos de cinco asignaturas cada curso. En Barcelona hacía poco tiempo que habían empezado el Plan Maluquer, un plan muy curioso que tenía algo muy bueno (cada alumno se hacía su plan de estudios a la carta. Había muchas asignaturas de tipo A que valían un punto cada una y muchas asignaturas de tipo B que valían medio punto cada una.Según la especialidad que quisiera elegir cada alumno había unas asignaturas obligatorias, el resto, hasta completar 5 puntos cada curso, durante 5 cursos las podías elegir como quisieras con asignaturas A d un punto cada una y asignaturas B de medio punto cada una) y algo no tan bueno (el hecho de que cada alumno se hiciera su propio plan hacía que no hubiera un curso-grupo de pertinencia como si había ocurrido en los bachilleratos, Turismo, Magisterio y los estudios universitarios anteriores al Plan Maluquer). En Palma todavía no existía ni universidad balear, ni delegaciones de las universidades de Balcelona, como si habría unos años más tarde. Me puse en contacto con la Universidad de la Laguna y con la de Barcelona, pregunté si había algunas asignaturas coincidentes en ambos planes y ambas universidades y si, en caso de haberlo, podía hacerlas en la Laguna y , en caso de aprobarlas, si me respetaría la calificación la de Barcelona. Esto era en enero de 1972 (ya había pasado el primer trimestre académico). Las dos universidades me respondieron afirmativamente, miramos coincidencias y, para primero, encontramos dos: A1: Introducción a la Filosofía y A31 Teoría y Práctica de la Lengua Española; en cuanto me matriculé en estas dos asignaturas, los profesores respectivos de la Laguna y Barcelona estaban en contacto. El profesor de Filosofía era el dr. Miguel Angel Ladero Quesada, lo sé por que lo apunté. El de Lengua española no lo recuerdo. Así contacté con la Psicología, aquella carrera que yo quería hacer, sin gasto alguno por parte de mis padres, que yo podría pagarme con mis propios ingresos, y ejercer.
En diciembre de 1972 me licenciaba del servicio militar, volvía a Mallorca y me matriculaba en la Universidad de Barcelona, en el curso 1972-73, de las tres asignaturas restantes del primer curso: Lengua Francesa, Introducción a la Psicología e Introducción a la Sociología , y las dos obligatorias de segundo curso: A10 Geografía de España y A18 Historia de España Moderna y Contemporánea. La Universidad de Barcelona había creado una extensión de su Facultad de Filosofía y Letras en Palma (poco después la Universidad Autónoma de Barcelona hiría lo mismo con la facultad de Ciencias) y cursé estas asignaturas en Palma, otra vez en el Estudio General Lul·lià, con profesores y profesoras de Palma que, en contacto con los de Barcelona, los de Barcelona de las correspondientes asignaturas respetaban la nota indicada por los de Palma, nota que se ponía en la correspondiente acta y expediente de Barcelona. Se consolidaba el inicio de los estudios de Psicología para desempeñar como profesión.
Antoni Ramis
25-03-2024