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El eje del mal. Israel
“Dime lo que me atribuyes y te diré cual es tu condición”.
La expresión “eje del mal” la acuñó el anterior presidente de los EEUU, el malo y beligerante George W. Bush (a quien le preocupaban poco “los daños colaterales”, aunque estos fueran la muerte de miles de civiles inocentes, mayoría de niños) el 29 de enero de 2002 en su discurso del Estado de la Nación. Este eje incluía a Iran, Iraq y Corea del Norte, países que, según Bush, apoyan el terrorismo. Posteriormente añadió a este eje a Libia, Siria y Cuba y, finalmente, a todos aquellos que no aceptan totalmente sus tesis de política internacional (su “nuevo orden mundial”). Así ha incluido a países como Bielorrusia, Venezuela o Bolivia. Esta expresión, “eje” proviene de “las potencias del eje” de la Segunda Guerra Mundial (Alemania nazi, Italia fascista y Japón).
No obstante, los países que, desde la perspectiva humanista, actualmente ocasionan mayores males en poblaciones civiles inocentes son los propios Estados Unidos e Israel. Por lo que el verdadero eje del mal sería EEUU-Israel. Dos países que, además, son aliados por motivos ideológico-económicos. EEUU protege las acciones de injusticia internacional realizadas por los propios EEUU, así como las realizadas por Israel. Israel, estado ubicado en Palestina (Asia) a quien venden armas EEUU, así como los países europeos aliados y que es acogido como país europeo (participa en las competiciones europeas deportivas y de Eurovisión).
Israel, inhumano e irresponsable
Israel, “pueblo de Dios”, es, en realidad, un infierno terrorífico, terrorista, para el pueblo palestino que tiene otro Dios diferente al de Israel.
El holocausto judío, especialmente de la Alemania nazi, provocó que muchos pueblos occidentales consideraran un deber de restitución acceder a una larga pretensión del pueblo judío, la creación de un estado de Israel en tierras de Palestina, cuando Palestina era una tierra administrada por Gran Bretaña. Lógicamente esta pretensión fue apoyada por EEUU y favorecida por Gran Bretaña.
El 2 de noviembre de 1917 Gran Bretaña publica la Declaración Balfour, por la que se declara partidaria de la creación, en Palestina, de un “hogar nacional judío”.
A principios del Mandato de Gran Bretaña (1922-1948) en Palestina había unos 80.000 judíos. En 1932 ya había unos 500.000. Y en la actualidad ya hay siete millones y medio, con una densidad de 343 habitantes por Km2.
La población de Israel es muy heterogénea procedente de judíos ricos de EEUU, Gran Bretaña, Argentina, Rusia,... con ideas e idiomas diferentes.
El 14 de mayo de 1948, un día antes del señalado por Gran Bretaña para dejar su Mandato en Palestina, declaró el estado de Israel (Gran Bretaña, EEUU y la mayoría de países occidentales eran partidarios de que se crearan dos estados Israel de población judía y Palestina de población árabe, algo que aceptaron los primeros, pero no los segundos que se consideraron desplazados de su tierra en la que habían vivido durante más de 20 siglos, por unos extranjeros emigrados desde todo el mundo).
Ver evolución del expansionismo de Israel:
http://elespiritudelchemin.wordpress.com/2009/12/25/palestina-la-tierra-que-le-duele-a-ella-saramago
Lo acertado de la decisión es discutible (algunos politólogos como Ramón Tamames creen que fue un error, creen que debía haberse creado un único estado con población judía y población árabe, con igualdad de derechos y obligaciones para ambas poblaciones, y con instituciones democráticas), el derecho de Israel a defenderse de los ataques árabes es indiscutible, pero lo que es inadmisible es la actitud sádica inhumana y asesina (no me gusta el término, pero no encuentro un sinónimo menos grave para indicar el hecho de matar inocentes indefensos) que mantiene el ejército y gobierno israelí respecto a la población civil árabe de Palestina: periódicamente nos escandalizamos (pero sin reaccionar, sólo como quien ve una película irreal) de bestialidades cometidas por estos exvictimas de nazis y ahora neonazis (en comportamiento): Aislamiento y bloqueo de Gaza, con muro de la vergüenza incluido, a pesar de la orden, incumplida, de la ONU en sentido contrario. Derrumbe, con excavadoras, de casas de árabes en los territorios ilegalmente ocupados y con orden de la ONU, incumplida, de retirarse de los mismos a las fronteras asignadas por la propia ONU, asesinatos selectivos sin juicio en esta población, disparos indiscriminados con resultados de muchos niños muertos y heridos,... Recuerdo, con escalofríos, la escena vista por televisión de una joven activista occidental que se echó en el camino de un tanque-excavadora que iba a destruir unas casas: el conductor del tanque, un animal subhumano, pasó, impertérrito, su máquina de muerte y destrucción por encima de la joven y destruyó las casas objetivo de su acción.
Actualmente, un grupo de barcos de organizaciones humanitarias constituyeron “la flotilla de la libertad”, formada por seis barcos, tres de los cuales turcos, e integrada por activistas de varios países entre los que destacamos a varios españoles, turcos, ingleses y hasta una persona israelí, con la intención de desbloquear Gaza y llevar ayuda humanitaria a la población de la zona. El último dia de mayo de este año (2010), la flotilla, en aguas internacionales y con rumbo a Gaza fue atacada por soldados israelíes descolgándose sobre los barcos (Mavi Mármara) desde helicópteros y ametrallando a los cooperantes que intentaban repeler a los asaltantes con tirachinas. Resultado: 9 muertos, decenas de heridos de mayor o menor gravedad y continuidad con el bloqueo prohibido por la ONU, prohibición desacatada por Israel. Los asaltantes (y asesinos de estos nueve cooperantes) declararon, con toda desfachatez, que habían sido atacados y agredidos “brutalmente” por los voluntarios que estaban en sus barcos en aguas internacionales. Igualmente secuestraron a parte de los cooperantes y trasladaron a la fuerza a Israel en donde, nuevamente con total desvergüenza y cinismo, les acusaron de “entrada ilegal” en Israel.
La mayoría de estados occidentales ofreció una tibia respuesta de queja o protesta por la agresión que recibieron los cooperantes occidentales en aguas internacionales sin que mediara ataque ni provocación previos algunos. La ONU se reunió y “lamentó” lo sucedido, pero no “condenó” ni al estado, gobierno o ejército de Israel por su ataque en aguas internacionales, crímenes, secuestros y bloqueo. Igualmente propuso que se creara una comisión de la propia ONU para investigar los hechos, a lo que Israel se negó: Ellos “habían actuado de acuerdo con la legislación internacional” y ellos mismos serían quienes harían la comisión investigadora: “Santa desvergüenza”. EEUU aceptó la propuesta de Israel de ser “juez y parte”.
Helen Thomas era la periodista más antigua acreditada en la Casa Blanca, desde 1960 con John F. Kennedy, hasta el pasado 27 de mayo de 2010 (Barack Obama). Este día supuso el fin de su carrera periodística en la Casa Blanca: Allá se celebraba el “mes de la Herencia Judía” y con tal motivo un rabino la entrevistó y preguntó su punto de vista sobre la situación en Israel a lo que contestó: “Que se larguen de Palestina”. A lo que el rabino insistió: “¿algún otro comentario?” a lo que Helen Thomas contestó: “Recuerde, esta gente, los palestinos, vive una ocupación en su propia tierra. No es ni Alemania ni Polonia. Los judíos deberían irse a su casa” “¿Y cuál es su casa?” preguntó el rabino a lo que Helen contestó: “Polonia, Alemania, América o cualquier otro sitio”. (información de Yolanda Monge en El Pais Semanal de 27 de junio de 2010). Esta opinión, llena de objetividad, realidad e imparcialidad, le supuso el fin de su carrera periodística de 50 años en la Casa Blanca. Actualmente se exige parcialidad a favor de mis amigos.
Ver escrito de Noam Chomsky, importante científico, judío americano, autoridad en estructuralismo, lingüística y análisis político internacional:
Imágenes del genocidio palestino:
Llegados a este punto, ¿cuál es la solución? De forma inmediata: condena clara de la ONU y todos sus miembros, sin ningún derecho de veto, al genocidio palestino aplicado por Israel; bloqueo inmediato y total a Israel en materia armamentística, de movimientos de bienes y personas hasta que abandonen el bloqueo a Palestina, supriman el muro de la vergüenza y abandonen los territorios palestinos ocupados ilegalmente. De forma más mediata, se puede trasladar el estado de Israel a Arizona o Nevada (EEUU) o a algún lugar de Gran Bretaña ya que estos países son quienes endosaron el estado de Israel al territorio palestino. ¿Por qué no se lo endosaron a si mismos? O, en caso contrario, suprimir el Estado de Israel y crear un estado Palestino plural que acoja a toda la población de la zona, con igualdad de derechos y deberes para todos los y las habitantes, prescindiendo de diferencias de raza, ideología, religión o lengua o cultura.
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Ver el escrito en IB-Digital en catalán:
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